Si es verdad que las tareas de la casa no son lo mas divertido, hay formas de hacerlas menos pesadas.
Además reconozcámoslo podemos no hacerlas, no hagamos las tareas de la casa ¿cuanto tiempo aguantarías con una casa desordenada y sucia? ¿Cuanto tiempo tardarían las cucarachas en notar que la casa no estar limpia?
Así que si decidimos hacerlas, hagámoslas de la mejor forma para que sea agradable y que transmitamos eso a nuestros hijos: es bueno vivir en un lugar limpio y ordenado y es agradable hacerlo.
¿No te parece?
Así que la invitación de hoy es a hacer las tareas de la casa, aquellas que nos ayudan a tener el espacio en el que habitamos como nos gusta (limpio, organizado, habitable) y que en lugar de hacerlo a regañadientes, enojadas o sintiendo frustración lo hagamos con una sonrisa y con música y cantando y bailando y disfrutándolo, es mas, quizá hasta jugando con nuestros hijos.
Estoy segura que no es lo único que te gusta hacer, es decir, no es que quiera que te pase el día entero limpiando, por favor no lo hagas nunca, pero hay rutinas que es mejor hacerlas a diario para que el trabajo no se junte y para mantener el hogar habitable. Dependerá de ti lo que hagas cada día: tender camas, lavar trastes, darle una pasada al baño, etc. Esos 15-20 minutos diarios que dedicas a las rutinas dedícalos de corazón y pintando una sonrisa en tu rostro.
Sonriendo harás las cosas con mas gusto y quizá, hasta mas rápido y entonces dedicarás el resto del día a hacer lo que te gusta, lo que disfrutas mas, pero el ambiente en casa será de orden, limpieza y armonía. Totalmente diferente, ¿no te parece?
Disfrutemos no solo el resultado, sino también el proceso. Así que a sonreír se ha dicho.
Te dejo besos
Muy cierto si de todas formas las vamos a hacer, mejor que sea con buena cara, así no nos resulta tan fastidioso. Excelente frase, besos.
Me alegra que te guste, además somos ejemplo para nuestros hijos, si lo hacemos con alegría ellos aprenderán que esta bien hacerlo.